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Los desguaces son negocios en los cuales venden piezas de vehículos de segunda mano. Por tratarse de una actividad económica se puede deducir claramente que los principales beneficiados son los dueños de tales establecimientos y los compradores. Sin embargo, esto no es tan superficial. Definitivamente, las bondades se irradian a un ámbito mucho mayor.

Del lado del comerciante, es lógico que sus dueños o accionistas se lucren. Esto también involucra el sustento de los respectivos trabajadores y la generación de pagos al Estado, como impuestos producto de las ganancias obtenidas.

Del lado del comprador, tiene la alternativa de adquirir un buen producto a un precio bastante reducido. Esto ayuda a aquellos individuos que no tienen dinero para comprarlos nuevos. Algunos, tienen la disponibilidad económica pero con esta opción logran ahorrar unos cuantos euros. Si esos vehículos receptores de los recambios son usados con fines comerciales, es probable que el producto o servicio que ofrezcan, a su vez, tengan un menor coste para la población, debido a que la estructura de gasto se ve disminuida.

Otra provecho que se obtiene de los desguaces tiene que ver con la conservación del planeta. Se disminuye la generación de desechos, al dar una oportunidad de reutilización de tantas piezas. Además, algunos contaminantes peligrosos para el medio ambiente son tratados adecuadamente y se llevan a los destinos asignados para tal fin.

Principales servicios de los desguaces

Podemos utilizar los desguaces para comprar repuestos usados, para cualquier parte que conforme el vehículo. Distribuyen piezas de todo tipo de marcas. Si existe, es muy probable que algunos de los establecimientos del país lo tengan.

También es oportuno acudir a ellos cuando decidimos dar de baja al automóvil. Ellos son especialistas en ese tipo de trámites, por lo cual, lo incluyen dentro de la transacción que se pacta. Tan solo hay que autorizarlos para que se encarguen de todo el proceso, desde la recogida del coche hasta que obtienen el certificado emitido por la Dirección General de Tráfico, en donde queda asentado que el vehículo sale de circulación.

Los desguaces pueden ser ubicados físicamente, es decir, ir hasta sus propias instalaciones, pero actualmente es factible dar con ellos a través de Internet, lo cual representa una gran ventaja porque elimina la necesidad de movilizarse. No obstante,  hay que ser muy cuidadoso con este medio. Para evitar inconvenientes, lo recomendable es acceder a directorios de buena trayectoria como lo es www.buscardesguaces.es.